SU CORAZÓN
9 de octubre de 1985
El tiempo se acorta cada día. La paz del mundo no llegará si no se vuelca a la misericordia del Señor. Dios habitará en quién ofrezca su corazón y será colmado de verdad.
Oren por sus enfermos así: Oh, santo Dios, rey fuerte, rompe sus cadenas, destruye su enfermedad, dale salud para que te conozca y pueda seguirte a tiempo. Amén.
El Espíritu del Señor mueve a los que trabajan para Él. El que recibe el Espíritu recibe vida y da vida.
Por los que no tienen fe oren así: Abre tus arcas Señor, funde el hielo de sus corazones, calienta su sangre con tu Espíritu, haz vibrar su alma con tu gracia, no por sus méritos sino por tu amor. Amén.1
Lectura: San Mateo, Cap. 25.
1 Tres veces en el día convierte a un pecador.
COPYRIGHT BY FUNDACIÓN MISERICORDIA DIVINA
ASOCIACIÓN DE LAICOS CATÓLICOS