CARGANDO...
POR FAVOR, ESPERE...




Cargando...
PROFECÍAS CUMPLIDAS Y MENSAJES CONFIRMADOS
ADVERTENCIAS FINALES
MENSAJES UNIVERSALES
MENSAJES SOBRE ARGENTINA
MENSAJES ESPECIALES
EL BUEN PASTOR Nro. 1 al 10
EL BUEN PASTOR Nro. 11 al 20
EL BUEN PASTOR Nro. 21 al 30
EL BUEN PASTOR Nro. 31 al 40
EL BUEN PASTOR Nro. 41 al 47
ÚLTIMOS MENSAJES
CONOZCA NUESTROS SITIOS


Edición Nro. 6

ANTERIOR     |     SIGUIENTE





EN EL MUNDO HAY URGENCIA
DE CENÁCULOS DE ORACIÓN

LA PLATA, 5 de agosto de 1988   |   Primer Viernes de mes
CENÁCULO NUESTRA SEÑORA DEL PERDÓN

Paz a vosotros, ovejas de mi rebaño.
Ved que fácil es ver cuando se desea ver lo que vuestro Señor desea mostrarles y no otra cosa. Ved que sencillo es oír lo que vuestro Señor desea deciros si abrís los oídos de vuestra alma. Ved que fácil es toda obra si la encomendáis al trabajo del Señor en vuestros corazones y si ponéis vuestra voluntad decidida a seguir mi santa inspiración.
Poco tiempo falta ya para que muchos sepan de esta Obra. Y os repito hoy: Debéis multiplicar vuestras oraciones. Hay urgencia de oración en el mundo pues a través de la oración interviene el Señor en la historia de los hombres enviando sus gracias, sus consuelos, sus dones, su amor. En el mundo hay urgencia de cenáculos de oración. Si os encomendase otra misión más difícil podríais disculparos mas cuan sencillo es para vosotros reunir algunas personas y orar poniendo vuestras intenciones en común. Nada más sencillo y nada más efectivo.
Y no juzguéis apresuradamente las cosas del Señor. No os detengáis en pequeños detalles dejando de lado toda la verdad que se derrama copiosamente frente a vuestros ojos. No avancéis en vuestra críticas si desconocéis la realidad, informaros bien primero, pues toda Obra del Señor por el Señor es defendida y guardáos de no estar luchando contra vuestro propio Dios pues ¿quién ha dado autoridad a hombre alguno sobre su propio Señor?
Y si los defectos de este instrumento arriesgan vuestra salvación aferráos a mis gracias.
Cumplid lo pedido, orad y enseñad a orar y veréis sonreir a vuestra Madre.
Y el Dueño de la paz os da la paz, os bendice, os sana en cuerpo y alma, recibid según vuestra fe pues por siempre soy vuestro Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Vuestro premio está en realizar vuestras pequeñas misiones individuales por mi amor y no el encarar grandes empresas basados en vuestro propio orgullo.
Si Yo os he perdonado, perdonad vosotros. Tened Paz.

Lectura: II Corintios, Cap. 2, Vers 12 al 17.





ANTERIOR     |     SIGUIENTE